LA REFORMA UNIVERSITARIA (1918-1930)
"La Reforma Universitaria ó "El Grito de Córdoba" como también se le llama, es uno de los antecedentes históricos que basamentan la fundación del APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana), en México en 1924.
Así lo dice el mismo Víctor Raúl Haya de la Torre, su fundador, al responder, en una entrevista realizada por el reportero Glauco Carneiro de la Revista "O CRUZEIRO" del Brasil, reportaje que salió publicado en el N° 23 del 1° de diciembre de l962:
"El APRA se ha iniciado por un movimiento educacional que deseaba la emancipación del pueblo, por la Educación.- Su origen histórico en su primera fase fue La Reforma Universitaria iniciada en Córdoba, en la Argentina, que quería reformular la Universidad a fin de colocarla al alcance del pueblo y para el pueblo,….."
Cuarenta años antes de este reportaje, en la primera página del Diario "El Pueblo" de Arequipa (Perú), del día l2 de julio de l942, aparece uno de las primeras entrevistas que se hizo a Víctor Raúl, cuando retornaba de una gira por las Repúblicas de Uruguay, Argentina y Chile, a donde viajó como delegado de la Federación de Estudiantes del Perú, cuya parte que interesa al presente artículo es la siguiente:
- "¿La Reforma Universitaria Argentina se halla cimentada?
Completamente. Los estudiantes han convertido las viejas universidades en amplios centros de cultura libre. Rectores, decanos y catedráticos trabajan entusiastamente con el alumnado por la obra constructiva después de la gran convulsión. El Congreso Nacional de Estudiantes reunidos en Córdoba concretó todos los grandes lineamientos de la ideología reformista y hoy no hay una sola conclusión de esa asamblea que no se haya cumplido, entre otras, la inauguración de la Universidad del Litoral y la nacionalización y ampliación de la de Tucumán. Yo creía conocer la Reforma Universitaria Argentina antes de vivir el ambiente de sus siete universidades, pude convencerme después que todo lo ignoraba. Ninguna sacudida más poderosa ni más eficaz que ese movimiento que ha transformado el espíritu de nuestros estudiantes estableciendo una verdadera democracia universitaria. El gobierno de los claustros es ejercido por la docencia y los alumnos igualmente y este nuevo sistema que superficialmente parece absurdo, constituye la más fuerte sugestión de estímulo para el trabajo de unos y otros".
- "¿La Reforma Universitaria Argentina cuenta con el apoyo del gobierno?"
"El gobierno argentino y sobre todo el Presidente de la nación al comprender la trascendencia de la obra de los estudiantes le prestaron y le prestan apoyo desinteresado. Es verdad que el primer empuje de los estudiantes ha soportado duras resistencias, pero nada habría podido avasallarlo y se impuso rápidamente al espíritu nacional. Personalmente, Hipólito Irigoyen me expresó sus conceptos sobre la reforma declarándome que era el verdadero punto de partida del renacimiento argentino, porque ella significaba la abolición del concepto utilitarista de la educación y de la renovación de hombres y sistemas".
- "¿La Reforma en el Uruguay?"
"Llegué a Montevideo en pleno movimiento y el comité estudiantil pro- reforma educacional me hizo el honor de presidir su tercera asamblea confiriéndome también su representación ante todas las universidades de Argentina, Uruguay y Chile. Las últimas noticias que he recibido me anuncian la prosecución triunfal del movimiento que no sólo abarca a las universidades, sino a los establecimientos de instrucción secundaria".
- ¿Y la de Chile?
"Cuando llegué a Santiago siendo portador de los mensajes estudiantiles del Uruguay y Argentina, la reforma no se había iniciado y sobre este punto ofrecí algunas conferencias. Las noticias del cable, referentes al asalto de la Universidad por los estudiantes y la expulsión del Rector me han comprobado una vez más cuánto puede una juventud que es unida y es viril".
En el Libro "El Drama de América Latina" del escritor norteamericano John Gunter, editado en más de cinco oportunidades, en la década del 40 del Siglo XX,aparecen los siguientes textos:
"Estuve con Haya de la Torre tres veces, y en cada ocasión me pareció estar en presencia de uno de los personajes más singulares de América. Las entrevistas fueron concertadas con bastante facilidad mediante la cortesía de ciertos amigos, si bien aparentemente el líder revolucionario está oculto. Es un refugiado a quien la policía no pierde de vista, y por más que sabe con seguridad dónde está, no lo arresta. La razón es, evidentemente, que el gobierno no desea exponerse al escándalo que provocaría su detención. Entretanto, el gobierno finge no tener conocimiento de su paradero y no se ha revelado oficialmente si pesa aún alguna denuncia contra él. Sin embargo, siempre que Haya de la Torre va a una reunión aprista secreta, sus amigos pueden ser arrestados después que él se retira. Dicha organización no tiene derecho legal para existir y todo aprista reconocido puede ser encarcelado en cualquier momento.
Haya de la Torre parece exactamente lo que es: un descendiente en línea directa de los conquistadores. Es un hombre de color cetrino, de ancha y fuerte espalda, y de mediana estatura. Su cabello, negro como el azabache, cae ondulante sobre ambas orejas, destacándolas. Su nariz es acentuadamente aguileña. Tiene brillantes ojos de color aceituna, posee un vivo sentido de la realidad política, así como también del buen humor, y habla inglés como un inglés.
Víctor Raúl Haya de la Torre nació el 22 de febrero de 1895 en Trujillo, al norte del Perú, una de las pocas ciudades peruanas que tienen nombre español y no indio. El día de su nacimiento es el mismo del de Jorge Washington, lo que le satisface, y también le agrada que su apellido materno sea Cárdenas, por cuanto siente gran admiración por el ex presidente Cárdenas, de México. Su padre fue periodista y tuvo un tío sacerdote. Se crió en un ambiente sumamente burgués, católico y respetable.
En su adolescencia Haya de la Torre leyó obras de Unamuno y de Nietzsche, aprendió francés y alemán, estudió piano y trepaba las montañas como deporte. Observó, asimismo, que de las cuarenta y tantas haciendas que producían azúcar en los alrededores de Trujillo, cuando él era niño, sólo quedaban dos cuando tuvo veinte años. Esta fue su primera lección acerca del poder de penetración de los grandes negocios. Más tarde, cuando aún no había cumplido veinticinco años, le sucedieron tres cosas que jamás ha podido olvidar. La primera de ellas fue cuando visitó el Cuzco, la antigua capital de los Incas. El joven Haya de la Torre recibió una viva impresión, provocada no precisamente por las ruinas, sirio porque vio lo que los antiguos indios habían levantado, y a sus descendientes oprimidos, azotados y dominados. Cuando regresó a Lima quiso construir una especie de monumento dedicado a Manco Cápac, el primer Inca, el fundador -como lo expresó él- de la nacionalidad peruana. (Haya de la Torre nunca erigió su estatua. Muchos años más tarde, lo hizo la colonia japonesa de Lima).
La segunda fue cuando Haya de la Torre visitó la Universidad de Córdoba, en la Argentina, y fue testigo del fermento social y político, "la Revolución' espiritual", como él la llama, que se operaba entre los estudiantes de aquélla. La mayor parte de las viejas universidades, como la de San Marcos, en Lima, eran catedrales de la reacción o, como dice Haya de la Torre en una de sus frases, "virreinatos del espíritu". Córdoba era diferente. Los jóvenes se estaban emancipando de la tradición católica europea, y trataban de pensar de acuerdo con Buenos Aires y no con París. "En Córdoba, allá por el año 1919, comprendí la decadencia de Europa", dice Haya de la torre. La "Reforma" nacionalista de Córdoba se propagó al norte, y afuera, a Chile y Perú. Haya de la Torre la trajo a Lima y llegó a ser el presidente de la. Federación de Estudiantes de la Universidad de San Marcos…………
Víctor Raúl Haya de la Torre, no obstante haber sido Presidente de la Federación de Estudiantes del Perú (FEP) que dirigió en 1919 la Reforma Universitaria desde la Universidad de "San Marcos" en Lima, con absoluta honestidad reconoce la "primogenitura",diríamos, en los movimientos estudiantiles de América, al Movimiento por la Reforma realizada en Córdoba-Argentina-.Señalamos esto porque se ha pretendido alguna vez, señalar a la Universidad del Uruguay o a la Universidad del Cuzco (Perú), como merecedoras de tal privilegio. Sin duda, los movimientos de estudiantes del Cuzco de Valcárcel y del Uruguay de Rodó fueron movimientos precursores.
(*) Diego vicuña Villar: peruano, cesante de la Administración Pública. Actualmente dedicado a la práctica y difusión de la Poesía Popular. Militante del Partido Aprista Peruano. Entre los cargos que ha ejercido figuran: Miembro del Comité Ejecutivo Nacional del PAP (Secretario nacional de Sindicatos), Regidor Metropolitano en la Municipalidad de Lima, Secretario General de la Federación Nacional de Trabajadores del Poder Judicial, Director General de Coordinación Parlamentaria del Ministerio de Economía y Finanzas del Perú y otros cargos menores. Ha escrito también libros y grabado cd´s con sus producciones.
"La Reforma Universitaria ó "El Grito de Córdoba" como también se le llama, es uno de los antecedentes históricos que basamentan la fundación del APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana), en México en 1924.
Así lo dice el mismo Víctor Raúl Haya de la Torre, su fundador, al responder, en una entrevista realizada por el reportero Glauco Carneiro de la Revista "O CRUZEIRO" del Brasil, reportaje que salió publicado en el N° 23 del 1° de diciembre de l962:
"El APRA se ha iniciado por un movimiento educacional que deseaba la emancipación del pueblo, por la Educación.- Su origen histórico en su primera fase fue La Reforma Universitaria iniciada en Córdoba, en la Argentina, que quería reformular la Universidad a fin de colocarla al alcance del pueblo y para el pueblo,….."
Cuarenta años antes de este reportaje, en la primera página del Diario "El Pueblo" de Arequipa (Perú), del día l2 de julio de l942, aparece uno de las primeras entrevistas que se hizo a Víctor Raúl, cuando retornaba de una gira por las Repúblicas de Uruguay, Argentina y Chile, a donde viajó como delegado de la Federación de Estudiantes del Perú, cuya parte que interesa al presente artículo es la siguiente:
- "¿La Reforma Universitaria Argentina se halla cimentada?
Completamente. Los estudiantes han convertido las viejas universidades en amplios centros de cultura libre. Rectores, decanos y catedráticos trabajan entusiastamente con el alumnado por la obra constructiva después de la gran convulsión. El Congreso Nacional de Estudiantes reunidos en Córdoba concretó todos los grandes lineamientos de la ideología reformista y hoy no hay una sola conclusión de esa asamblea que no se haya cumplido, entre otras, la inauguración de la Universidad del Litoral y la nacionalización y ampliación de la de Tucumán. Yo creía conocer la Reforma Universitaria Argentina antes de vivir el ambiente de sus siete universidades, pude convencerme después que todo lo ignoraba. Ninguna sacudida más poderosa ni más eficaz que ese movimiento que ha transformado el espíritu de nuestros estudiantes estableciendo una verdadera democracia universitaria. El gobierno de los claustros es ejercido por la docencia y los alumnos igualmente y este nuevo sistema que superficialmente parece absurdo, constituye la más fuerte sugestión de estímulo para el trabajo de unos y otros".
- "¿La Reforma Universitaria Argentina cuenta con el apoyo del gobierno?"
"El gobierno argentino y sobre todo el Presidente de la nación al comprender la trascendencia de la obra de los estudiantes le prestaron y le prestan apoyo desinteresado. Es verdad que el primer empuje de los estudiantes ha soportado duras resistencias, pero nada habría podido avasallarlo y se impuso rápidamente al espíritu nacional. Personalmente, Hipólito Irigoyen me expresó sus conceptos sobre la reforma declarándome que era el verdadero punto de partida del renacimiento argentino, porque ella significaba la abolición del concepto utilitarista de la educación y de la renovación de hombres y sistemas".
- "¿La Reforma en el Uruguay?"
"Llegué a Montevideo en pleno movimiento y el comité estudiantil pro- reforma educacional me hizo el honor de presidir su tercera asamblea confiriéndome también su representación ante todas las universidades de Argentina, Uruguay y Chile. Las últimas noticias que he recibido me anuncian la prosecución triunfal del movimiento que no sólo abarca a las universidades, sino a los establecimientos de instrucción secundaria".
- ¿Y la de Chile?
"Cuando llegué a Santiago siendo portador de los mensajes estudiantiles del Uruguay y Argentina, la reforma no se había iniciado y sobre este punto ofrecí algunas conferencias. Las noticias del cable, referentes al asalto de la Universidad por los estudiantes y la expulsión del Rector me han comprobado una vez más cuánto puede una juventud que es unida y es viril".
En el Libro "El Drama de América Latina" del escritor norteamericano John Gunter, editado en más de cinco oportunidades, en la década del 40 del Siglo XX,aparecen los siguientes textos:
"Estuve con Haya de la Torre tres veces, y en cada ocasión me pareció estar en presencia de uno de los personajes más singulares de América. Las entrevistas fueron concertadas con bastante facilidad mediante la cortesía de ciertos amigos, si bien aparentemente el líder revolucionario está oculto. Es un refugiado a quien la policía no pierde de vista, y por más que sabe con seguridad dónde está, no lo arresta. La razón es, evidentemente, que el gobierno no desea exponerse al escándalo que provocaría su detención. Entretanto, el gobierno finge no tener conocimiento de su paradero y no se ha revelado oficialmente si pesa aún alguna denuncia contra él. Sin embargo, siempre que Haya de la Torre va a una reunión aprista secreta, sus amigos pueden ser arrestados después que él se retira. Dicha organización no tiene derecho legal para existir y todo aprista reconocido puede ser encarcelado en cualquier momento.
Haya de la Torre parece exactamente lo que es: un descendiente en línea directa de los conquistadores. Es un hombre de color cetrino, de ancha y fuerte espalda, y de mediana estatura. Su cabello, negro como el azabache, cae ondulante sobre ambas orejas, destacándolas. Su nariz es acentuadamente aguileña. Tiene brillantes ojos de color aceituna, posee un vivo sentido de la realidad política, así como también del buen humor, y habla inglés como un inglés.
Víctor Raúl Haya de la Torre nació el 22 de febrero de 1895 en Trujillo, al norte del Perú, una de las pocas ciudades peruanas que tienen nombre español y no indio. El día de su nacimiento es el mismo del de Jorge Washington, lo que le satisface, y también le agrada que su apellido materno sea Cárdenas, por cuanto siente gran admiración por el ex presidente Cárdenas, de México. Su padre fue periodista y tuvo un tío sacerdote. Se crió en un ambiente sumamente burgués, católico y respetable.
En su adolescencia Haya de la Torre leyó obras de Unamuno y de Nietzsche, aprendió francés y alemán, estudió piano y trepaba las montañas como deporte. Observó, asimismo, que de las cuarenta y tantas haciendas que producían azúcar en los alrededores de Trujillo, cuando él era niño, sólo quedaban dos cuando tuvo veinte años. Esta fue su primera lección acerca del poder de penetración de los grandes negocios. Más tarde, cuando aún no había cumplido veinticinco años, le sucedieron tres cosas que jamás ha podido olvidar. La primera de ellas fue cuando visitó el Cuzco, la antigua capital de los Incas. El joven Haya de la Torre recibió una viva impresión, provocada no precisamente por las ruinas, sirio porque vio lo que los antiguos indios habían levantado, y a sus descendientes oprimidos, azotados y dominados. Cuando regresó a Lima quiso construir una especie de monumento dedicado a Manco Cápac, el primer Inca, el fundador -como lo expresó él- de la nacionalidad peruana. (Haya de la Torre nunca erigió su estatua. Muchos años más tarde, lo hizo la colonia japonesa de Lima).
La segunda fue cuando Haya de la Torre visitó la Universidad de Córdoba, en la Argentina, y fue testigo del fermento social y político, "la Revolución' espiritual", como él la llama, que se operaba entre los estudiantes de aquélla. La mayor parte de las viejas universidades, como la de San Marcos, en Lima, eran catedrales de la reacción o, como dice Haya de la Torre en una de sus frases, "virreinatos del espíritu". Córdoba era diferente. Los jóvenes se estaban emancipando de la tradición católica europea, y trataban de pensar de acuerdo con Buenos Aires y no con París. "En Córdoba, allá por el año 1919, comprendí la decadencia de Europa", dice Haya de la torre. La "Reforma" nacionalista de Córdoba se propagó al norte, y afuera, a Chile y Perú. Haya de la Torre la trajo a Lima y llegó a ser el presidente de la. Federación de Estudiantes de la Universidad de San Marcos…………
Víctor Raúl Haya de la Torre, no obstante haber sido Presidente de la Federación de Estudiantes del Perú (FEP) que dirigió en 1919 la Reforma Universitaria desde la Universidad de "San Marcos" en Lima, con absoluta honestidad reconoce la "primogenitura",diríamos, en los movimientos estudiantiles de América, al Movimiento por la Reforma realizada en Córdoba-Argentina-.Señalamos esto porque se ha pretendido alguna vez, señalar a la Universidad del Uruguay o a la Universidad del Cuzco (Perú), como merecedoras de tal privilegio. Sin duda, los movimientos de estudiantes del Cuzco de Valcárcel y del Uruguay de Rodó fueron movimientos precursores.
(*) Diego vicuña Villar: peruano, cesante de la Administración Pública. Actualmente dedicado a la práctica y difusión de la Poesía Popular. Militante del Partido Aprista Peruano. Entre los cargos que ha ejercido figuran: Miembro del Comité Ejecutivo Nacional del PAP (Secretario nacional de Sindicatos), Regidor Metropolitano en la Municipalidad de Lima, Secretario General de la Federación Nacional de Trabajadores del Poder Judicial, Director General de Coordinación Parlamentaria del Ministerio de Economía y Finanzas del Perú y otros cargos menores. Ha escrito también libros y grabado cd´s con sus producciones.
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